Desde el Aspe

martes, 27 de marzo de 2012

Riglos - Murciana

Otra vez damos con nuestros huesos en Riglos y esta vez no buscando el sol precisamente que lo tuvimos y de pleno. La visita en un principio era con un objetivo claro, La Carnavalada, pero discrepancias familiares ajenas a nosotros hicieron que el objetivo se desplazara unos metros a la derecha y dicha vía quedara pospuesta hasta la semana que viene. Pues nada el que manda manda y Mikel y yo a lo que nos digan... la Murciana, pues venga, si tu lo tienes claro...
El aparcamiento a rebosar de coches y escaladores y entre tanta gente, sorpresa, Aritz y Blanca, y Maider y Juan Mari y como no, con idea de hacer también la misma vía. Si es que somos de un original todos...
Y entre que no, que cambio yo y no faltaba mas que ya hacemos otra nosotros (originales no, pero educaos...) nos fuimos todos hacia el pie de vía.

Entramos Mikel M. y un servidor primero y por detrás colapsando la vía Pitu y Mikel P. por un lado y Aritz y Blanca cerrando el pelotón. La otra pareja se decidió por la Vixente Inuxente. Unos valientes.

Vista del primer largo
El primer largo pensé yo que era el que daba nombre a la vía, por aquello de que las chapas están en Murcia, pero ya me dijeron que no, que era cosa de los aperturistas y que los alejes eran solo en este primer largo. Pues eso, larguito en diedro de 6b con paso, eso si, bien protegido y el resto fácil pero casi en "solo integral".

Pitu llegando a la primera R

En plena faena en el segundo
El segundo es una fisura de 6a+, que, como casi toda la vía, esta bastante pulida, pero que se deja hacer bien y en la que se pueden guardar fuerzas ya que se escala practicamente todo en oposicion y la fisura es de grandes manos. Muy bonito.
sTercero y cuarto son muy parecidos, verticales, con grandes cantos pero eso si, que es mejor no pararse a pensar mucho y seguir tirando, ya que apenas tienen descansos y te van poniendo y poniendo. Son para disfrutar y se disfrutan y mucho y eso que algunos, no sabíamos lo que nos esperaba mas arriba.

Mikel y Maider tirando largos

 El quinto es el famoso largo llamado "la bolera" que es fácil reconocer por que se le llama así. Son bolos y mas bolos de todos los tamaños, sobre un muro sin panzas, como hasta ahora, pero que va desplomando cada vez un poco mas. Patio por debajo y muro por arriba, espectacular.

A Maider y Juan Mari les daba tiempo para todo

Pitu terminando "la bolera"
Para Mikel P. y para mi la Murciana podía haber acabado aquí y tan contentos, cinco largazos encadenados, a merendar y para casa. Pero no acaba aquí, no, quedan tres y que tres. Ya llegas con los brazos de aquella manera y te queda lo peor... no es justo, pero es así. Siguiente largo 6c y comienzan las panzas. Ya digo que no se si son las fuerzas que ya están justas, pero se nos hizo muy duro y obligado. Aceras, pones un estribo y lo que sea, pero hay que salir de los pasos escalando y eso después de marranear cuesta mucho.

Intentando salir como sea
Y el siguiente, el séptimo, aunque le dan 6b, es parecido, incluso obliga mas en los pasos, están protegidos pero hay que tirar y mucho para salir de ellos. Y el ultimo, 6b+, ya lo corona, un desplome potente en el que si te caes penduleas y te sales de la vía. Luego murito durillo y a cima que ya es hora.

Hay caras que lo dicen todo
Hay que decir que estas sensaciones son solo mías y de mi compañero blogero, por que otros, lo sacaron todo o casi todo en libre y casi sin despeinarse. En fin yo de mayor también seré así, seguro y es que esto del grado es lo que tiene, o tienes o sufres como un bellaco.
De todas maneras aunque no lo parezca disfrutamos un montón y nos hicimos una vía grandiosa al Pisón que son palabras mayores.
Luego muchos rápeles y muchas risas todos juntos, culminandolo con una merienda/cena para recordar.
 

La leyenda continua...
Mikel P/ Pitu / Mikel M / Oscar

miércoles, 14 de marzo de 2012

Riglos - Mallo Fire - Directa as cimas

RIGLOS - Mallo Fire - Directa as cimas -
Esta vez no fuí yo quien llamé a mitad de semana preguntando por los planes para el fin de semana, pero daba igual, cuando M.M. llama para proponer algo, la respuesta es si, luego ya preguntaremos a donde y a hacer que. Y el plan era intentar un segundo asalto al Mallo Fire, que quince días antes habíamos tenido que abandonar debido al fuerte viento con el que nos encontramos. Y aunque viento la verdad es que si que se movía, nos preparamos y nos fuimos hacia el pie de vía. Sorpresa, se podía estar y además el sol ya calentaba.
La idea era otra vez haber ido en dos cordadas, que siempre es mas ligero, pero no se, no se si es por la ruta elegida o por la compañía pero el caso es que allí estábamos otra vez los tres... ellos se lo pierden.
 
En su día la propuesta nos asustó un poco, para que nos vamos a engañar, era el mayor reto que nos habían propuesto hasta la fecha. Pero como todo supongo, a toro pasao, la elección era perfecta, (hombres de poca fe !!)  Lo tiene todo; ambiente tranquilo al estar un poco mas alejado del resto de los mallos grandes, una vista del entorno distinta a la habitual y una vía que no te deja indiferente. Con un equipamiento de escalada deportiva y unos largos de los que no quitarías ninguno por que todos tienen su aquel.


Empezando el primer largo
No predominan las panzas, que las hay, es mas escalada de continuidad, con canto mas pequeño o más grande pero sobre muros verticales o ligeramente desplomados mas arriba.
Unimos los dos primeros, 5c + 6a. Nada fáciles y junto con el siguiente, los de roca más sospechosa. Son de mirar bien y moverse a un lado y al otro buscando el famoso "bolo riglero" que no es que abunde en exceso.
Terminando el segundo
Al tercero le dan 6a+ pero no lo es tanto, aunque la roca no da buen punto todavía, los agarres son mayores. Comienza librando por la izda un desplome de los de - menos menos mal que no es por ahí-
El cuarto largo es junto con el quinto un disfrute total eso si muy distintos. Uno, 6b, plaquero pero muy bueno de manos y pies, lo ves de abajo y parece no haber nada pero lo acabas disfrutando y deseando que no se acabe.
Impresionante vista del L4
Y el otro, 6c, muy variado, salida sobre muro, diedro después y desplome de llegada a reunión que le da el grado al largo. Una apretada vamos..
Mikel. P. atacando el L5
A partir de aquí comienzan los que he querido llamar largos sorpresa, por que todos esconden algo. El primero de ellos el L6 de 6b+ ,te deja ir muy bien, para que te lo vayas creyendo, hasta que toca llegar a la reunión yyyy.. pues eso, sorpresa, pasito que no esperas. No sabría describirlo, raro el.

¿Que deparará el futuro?
Y así llegamos al temido séptimo, duro de principio a fin pero sobre todo en su comienzo, que después de que lo has pasado te sigue poniendo hasta el final, vamos que no hay tregua. Eso si muy bien protegido en todo momento.

Mikel M. apretando en la salida del L7
Y cuando ya tienes los brazos para pocas historias llega el larguito sorpresa por excelencia, el mal llamado 6a+. Mira que lo sabíamos, sabíamos que no había que confiarse, que la vía no acababa en el anterior, pero ni por esas. Son "solo" 45mts de pasitos y pasitos que menos nuestro guia Mikel M. sufrimos hasta conseguir llegar, eso si, dignamente hasta la R.
Con las fuerzas ya justitas atacamos el último y también bastante tramposo largo nueve, 5c ó mas diría yo pero bueno vamos a dejarlo así que sera por que ya estábamos cansados...

A por el ultimo
Luego la bajada, que se hace muy bien en dos rápeles y alguna destrepada y que por cierto también es bonita por sus vistas y sus destrepes sobre raíces de un enorme Tejo.
Bajada entre árboles y raices
Reuniones con "ambiente"
 
Resumiendo, que disfrutamos mucho, escalamos mucho, apretamos más y nos hicimos una vía muy recomendable que aunque por aquello de no liar las cuerdas, por supuesto, se la hizo toda de primero el mayor de los mikeles, no obliga demasiado y te llevas para casa una cima al Fire.
Mikel M./ Mikel P. /Oscar

domingo, 4 de marzo de 2012

Peña Rueba - Edu Roche

PEÑA RUEBA
Hacia tiempo que teníamos en tareas pendientes una visita a este lugar antaño poco visitado pero que actualmente pudimos descubrir que se ha convertido en una alternativa a sus vecinas paredes de Riglos, sobre todo tal vez por su grado mas asequible y por su equipamiento claramente mas generoso. A lo largo de la mañana las paredes del "Mallo la mora" se fueron poblando de cordadas sobre sus tres recorridos, pereciendo sus reuniones en algunos momentos paradas del autobús. Menos mal que nosotros somos de madrugar...!!!
La ruta que nosotros elegimos fue la "Edu Roche" 220m 6b V+ oblig. Hacia un tiempo habíamos hecho la "Directa al mallo la mora" vía que empieza justo a su izquierda ( para luego cruzarse y seguir por la derecha) y que nos pareció muy disfrutona, con buena roca en general y con largos donde había que apretar.

 
Pero las sensaciones en esta no fueron las mismas. Sin querer despreciarla por supuesto, nos pareció que le falta continuidad en su grado de dificultad, es decir que todo se concentra en dos largos, L1 + L2 y L8, y el resto resultan demasiado fáciles, V con pasos aislados de V+, vamos que le falta un poco de picante. Bueno la salida del sexto largo, un desplome gorilero pero nada mas.

Dani tanteando la roca
Comienza la vía con dos largos (que unimos) de 6a/6a+. Salida desplomada y muro de dudosa roca y de buscar bien los agarres pero bonito de hacer en general.

Salida con desplome
El tercero y el cuarto también unimos, son dos largos de transición, IV+ que le quitan "ambiente" a la vía, una pena.
Luego, lo dicho, quinto, sexto y séptimo muy llevaderos salvo la panza de salida del sexto, una levantada sobre una repisa con poco canto que no es fácil y poco mas.
Mikel en el sexto

Txus buscando a su compañero
Luego llegaría el L8, que sale por un diedro muy bonito, 6a, para meterte bajo la primera de las panzas que hay que liberar, 6b+, dura, con poco canto y que a todos nos costo sacar. Eso si, como todo, bien protegida y con un cordino a la salida para poder acerar. Un poco mas arriba la segunda, que es la llegada a la reunión y que se deja hacer mejor.


Mikel en el diedro del L8
Y de ahí hasta arriba con mucho viento y algún problemilla con la cuerda... eh Mikel?
En resumen, buena vía si no buscas un día de aventura y emoción y te gusta disfrutar de una escalada sin sobresaltos.
Bajada por la ferrata, como siempre, y eso que a mi me sigue sin gustar la dichosa bajada, y para terminar Dani probó el primer largo de "El tiempo que nos queda" y los demás el de  la "Ignacio Cinto" que por cierto nos gustó y por que no, podría ser la puerta abierta para volver a este bonito lugar.


Dani en la "Ignacio Cinto"
Vista del mallo
Txus, Dani, Mikel P. y Oscar