Desde el Aspe

lunes, 27 de enero de 2014

Riglos - Aguja Roja - Villarig

Otra vez en Riglos y ya no recuerdo cuando fue la última vez, ya no me llevan, la nieve ocupa la temporada invernal de mis posibles acompañantes rigleros... y no es una crítica que conste, es una reflexión. Me encanta que le vamos a hacer, tambien acojona como no, Riglos exige preparación física y mental eso lo sabemos todos y yo ultimamente ando escaso de las dos, así que para primer día un mallo pequeño va de perlas. Me voy con Sergio, con quien he compartido ratos en el tablón y ultimamente compartimos mesa de vez en cuando, una bestia en la "resina" y escalador deportivo ocasional sin experiencia en vías de largos, pero con ganas de probar y aprender y además no esquía...
Villarig, una vía de gratos recuerdos; mi primera riglera poniendo las cintas y aventurilla rocambolesca con Mintxo posterior. Cuatro largos que se hacen en tres de escalada agradecida y disfrutona, en muros y fisuras sin una sola de las tradicionales panzas de la zona, y todo ello bien equipado, lo dicho, un lujo para ir haciéndose otra vez al conglomerado y de paso practicar técnicas en reuniones en el tranquilo ambiente que se respira en esta estética aguja.


Reseña de Luichy.
 
Corta aproximación a su cara Oeste de donde parte esta clásica de la Aguja Roja, tarda en dar el sol por su orientación, pero la temperatura es buena para estas fechas y permite escalar sin problemas al menos por ahora. Primer largo de unos cincuenta mts si nos saltamos la primera reunión (recomendable) y montamos en la segunda, algo colgada pero se queda un largazo para disfrutar. Muro con buen canto al principio, y fisura a mano llena después.





Salimos a nuestra izquierda de la R para seguir por la cada vez mas ancha fisura, con un paso tonto a los pocos metros. La segunda reunión se encuentra en una amplia repisa muy a la derecha, la dificultad decrece y los seguros también, no seguir por las chapas blancas de la Pecho Lobo.


 Sinuoso por sus constantes zigzagueos pero muy bonito en muro de canto vertical el tercero, muy chapado incluso demasiado, resulta a veces incómodo si no se lleva un buen número de cintas largas. Encontraremos una R a pocos metros de la cumbre, recomendable para verse y oirse si el día esta ventoso como es el caso.





Desde aquí una corta trepada un tanto rota donde podremos lazar una sabina o un viejo clavo. El rápel se hace en tres por la Normal, totalmente al Norte usando una intalación montada a base de siergas que coronan la cumbre. Nosotros confundidos pero también valido, nos bajamos de una sabina que te lleva por la reciente Vía del Suizo, equipada con anillas también pero con un rápel mas. Por cierto, tiene buena pinta...


La idea era hacer otra vía mas pero el sol prometido se diluyó enseguida y el viento cada vez era más frio, así que vuelta al coche y al bar a contar mentiras que eso se nos da mejor. A ver si le entra el gusanillo a Sergio y quiere repetir, que tipos rocosos y de buen conformar, son excelentes compañeros para estas batallas.

Sergio / Oscar.